Santo Domingo Oeste, 07 febrero 2021.- Tras ser trasladado fuertemente custodiado por agentes policiales desde la cárcel del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva hasta el penal Najayo Hombres, de San Cristóbal, Argenis Contreras González, principal acusado de la muerte del catedrático universitario Yuniol Ramírez debió pasar este sábado su primera noche en una celda de extrema seguridad, a lo que tanto le huyó cuando se escapó a Estados Unidos el día siguiente del crimen, el 12 de octubre del 2017.
La llegada del acusado se produjo a eso de las 4:00 de la tarde, de la mano de policías que como el propio contreras vestían chalecos antibalas y cascos protectores metálicos.
Contreras González, deberá cumplir un año en el Centro de Corrección y Rehabilitación de Najayo, como medida de coerción dispuesta este viernes por por la magistrada Kenya Romero, del Cuarto Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional.
La jueza Romero, del Cuarto Juzgado de Instrucción del Distrito Nacional, también levantó el viernes la rebeldía de Contreras González, como había solicitado el Ministerio Público, y fijó para el 19 de marzo, a las 9:00 de la mañana, la audiencia preliminar del caso, que había sido declarado complejo.
El imputado y otrora prófugo de la justicia, es identificado por las autoridades como “el hombre que apretó el gatillo de la pistola Smith & Wesson, calibre 9mm, color negro, numeración SAA0738, y disparó a la cabeza de Yuniol Ramírez Ferreras” la tarde del día anterior a su huida a Estados Unidos.
Contreras González fue atrapado el 11 de abril del 2018 por el Servicio de Inmigración y Control de aduanas de los Estados Unidos, por lo que presentó varios recursos en procura de revertir el proceso de deportación en su contra, los cuales fueron rechazados.
El presunto asesino de Ramírez fue traído la semana pasada al país junto a otros ex convictos, después de tres años y casi cuatro meses del horrendo crimen, que al mismo tiempo puso al desnudo una red de corrupción que para ese entonces operaba en la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses OMSA, dirigida por el también imputado Manuel Rivas.
La defensa del acusado de matar a Ramírez, quien además de profesor, jurista y comunicador, presidía la Convergencia Nacional de Abogados, es que su cliente no había venido antes por desconfiar de un Ministerio Público que, paradójicamente, desde el 12 de octubre del 2017, cuando salió del país un día después del asesinato, no hizo esfuerzo alguno por su extradición.
Fuente: elcorreo.do
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