Santo Domingo Oeste, 30 mayo 2019.- El centro educativo Amor de Dios, ubicado en el Palmar de Herrera, es un centro dedicado a tratar a niños con ciertos problemas de conducta. La directora Sor Clara Figueroa es la creadora de este centro educativo, que más que alfabetizar, le dan las bases de una educación en el respeto y el amor.
La escuela Amor de Dios empezó su construcción en 1989, con el apoyo de la comunidad de la congregación de hermanas del Amor de Dios. Sor Clara expresó que la escuela recibe mucha ayuda de los padres y que gracias a eso el centro se ha mantenido a flote.
A pesar de los esfuerzos de la directora, “Amor de Dios” no da abasto a las necesidades que tiene Palmar de Herrera, pues la escuela está sobrepoblada, además de los problemas que tienen con algunos padres despreocupados y la falta de la enseñanza de los valores, han dificultado la tarea de Sor Clara.
Con varios casos registrados de agresividad, violencia e irrespeto, la organización trata de reformar a estos niños poniéndolo bajo la asistencia constante de psicólogos escolares. Juana Victoria, psicóloga del centro, explicó las estrategia de cómo se trabaja con los niños problemáticos. “Lo primero que se hace es un trabajo reflexivo, se pone al niño a trabajar a reflexionar en su conducta y el hecho.
Si esto no da resultado entonces se trata de trabajar en conjunto con los padres.
“Algunos de los niños han logrado cambiar su conducta agresiva” manifestó Victoria.
Según la psicóloga, los niños problemáticos, tienden a progresar más e integrarse al programa si tienen el apoyo de los familiares, ya que si se desea modificar la conducta del niño es necesario modificar el entorno familiar.
El plantel, en la actualidad les da asistencia a 800 niños, desde preprimaria hasta el segundo grado de secundaria, la escuela cuentan con un área de recreación, una cancha, las respectivas aulas de clase y una biblioteca. Este centro está reconocido por el Ministerio de Educación, tiene un índice de promoción del 94% en primaria y secundaria.
Por: Luisanna Carrasco
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